El asma y la apnea del sueño

Potencialmente letal por la deficiencia de oxígeno

El asma (del griego: «deficiencia respiratoria») es una enfermedad crónica inflamatoria de las vías respiratorias que a largo plazo hipersensibiliza los bronquios. La membrana mucosa de las vías respiratorias reacciona desmesuradamente ante distintos estímulos. Las consecuencias son una sensación de estrechez en el pecho, tos, dificultad para respirar y frecuentes episodios de ahogamiento, que incluso pueden provocar la muerte.

 

Las personas que padecen asma también suelen sufrir interrupciones de la respiración durante el sueño, debido a los ronquidos. Con este cuadro sintomático, hablamos de la denominada apnea obstructiva del sueño. (Obstructiva, del latín: «bloqueo» - Apnea, del griego: «interrupción de la respiración»). Estas interrupciones de la respiración pueden durar mucho más de un minuto, hasta que  el afectado despierta con un ronquido explosivo mientras intenta tomar aire desesperadamente y, a continuación, reanuda la respiración.

 

La apnea del sueño tiene consecuencias muy serias: suele provocar diabetes tipo 2, hipertensión o insuficiencia renal. Otros efectos peligrosos suelen ser los trastornos cardiacos y circulatorios, como los derrames y los infartos.

¿El asma provoca la apnea del sueño o viceversa?

Precisamente esa pregunta quiso responder Mihaela Teodorescu, directora del equipo de investigación de la «Wisconsin School of Medicine and Public Health». Durante el estudio que llevó a cabo, evaluó datos de 547 participantes. La conclusión fue que los asmáticos que participaron en el estudio padecían apnea obstructiva del sueño con mayor frecuencia que los sujetos sanos. Los resultados de este estudio demuestran que principalmente los asmáticos mayores de 36 años roncan con mayor intensidad y tienden a sufrir interrupciones de la respiración durante el sueño. Además, la enfermedad les afecta con más gravedad de lo normal.

 

Los asmáticos suelen necesitar un tratamiento a base de cortisona para paliar sus síntomas. Los investigadores constataron que dicho tratamiento modifica negativamente las estructuras y funciones de las vías respiratorias superiores. Este es el resultado del estudio: Los asmáticos que deben consumir cortisona almacenan grasa en la región de la garganta. Ello genera la aparición de estrechamientos visibles en estas zonas sensibles, lo cual dificulta gravemente la respiración y empeora ostensiblemente el trastorno de la apnea del sueño.

Causas del asma y la apnea del sueño

Obviamente, el estrechamiento de las vías respiratorias provoca deficiencias de oxígeno duraderas, y supone una dificultad añadida para los asmáticos. El estrechamiento o incluso el bloqueo de las vías respiratorias también es la causa de la apnea del sueño. Las personas que padecen apnea del sueño, debido a que su maxilar inferior es demasiado pequeño y retrasado, tienen la lengua excesivamente atrasada en la cavidad bucal. Por ello, debido a la falta de espacio, la lengua obstaculiza las vías respiratorias. Durante el sueño, se desplaza hacia atrás y cierra las vías respiratorias como un tapón. Con todo ello, queda claro que en muchísimos casos, los efectos negativos del asma y la apnea del sueño se refuerzan recíprocamente, e incluso se potencian. Las consecuencias de una deficiencia de oxígeno prolongada en el tiempo pueden ser letales.

Atajar la raíz del problema

La solución de este problema es la única intervención quirúrgica que funciona en estos casos. En la clínica Professor Sailer, mediante un desplazamiento indoloro de los maxilares hacia delante, las vías respiratorias se amplían en gran medida. En consecuencia, los pulmones obtienen el oxígeno que necesitan y los problemas respiratorios pasan a la historia.

Gracias a un método quirúrgico único en el mundo desarrollado por el profesor Sailer, denominado  «Rotation Advancement» , las vías respiratorias se amplían en gran medida. La respiración mejora enormemente y el cuadro sintomático del asma también mejora o desaparece por completo. Con esta operación, la apnea obstructiva del sueño, que puede resultar letal, se cura para siempre.